El agua en el
jardín es uno de elementos compositivos más importantes a la hora de diseñar y decorar un espacio exterior. Desde la antigüedad se ha venido utilizando con
distintas intenciones tanto estéticas como prácticas; un estanque pequeño en el jardín puede tener infinidad de funciones: ser un generador de sonidos, creador de reflejos,
contenedor de fauna acuática, jardinera para algunas especies de plantas e
incluso actuar como elemento regulador de temperatura.
Fuente diseño de La Habitación Verde
En los jardines y a lo largo de la historia de los jardines encontramos representada el agua de numerosas formas; fuentes, canales, rías,
lagos, piscinas y estanques aparecen en lugares como puntos de atracción y
contemplación. La presencia del agua se asocia a lugares y espacios que inspiran tranquilidad y sosiego.
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Fuente diseño de La Habitación Verde |
En la actualidad el
tamaño de nuestros jardines se ha visto reducido considerablemente, sobretodo
en el caso de los jardines particulares, pequeños patios, terrazas y jardines en
nuestras viviendas son los nuevos lugares de disfrute personal y aunque el tamaño reduce las posibilidades, los elementos de agua siguen siendo muy atractivos
y se pueden incluir en estos espacios: una fuente o un pequeño
estanque nos ayuda a evadirnos del ruido de la ciudad.
Muchos propietarios
piensan que tener un pequeño estanque para el jardín es complicado, pero los nuevos complementos nos lo ponen más fácil de lo que parece, y es que no es necesaria una instalación complicada, sólo disponer de las piezas y el material adecuado. Podemos elegir entre una amplia gama de
productos y una opción muy acertada es utilizar un elemento que nos guste mucho como un gran cuenco, una pila de piedra o un
elemento de decoración antiguo y adaptarlo como fuente.
No hay que olvidar que debemos seguir ciertas pautas en la elección de un
estanque para nuestro jardín, y si puedes lo mejor es contar con un profesional para que realice un diseño personalizado adecuado para el espacio en el que se va a colocar.
Si decides tener un estanque en tu jardín recuerda estas claves básicas de diseño: escoge materiales
de calidad y preferiblemente naturales, piensa con cuidado la ubicación,
combina el tipo de estanque con el jardín circundante, organiza el espacio
y las relaciones con el estanque creando un rincón mágico para disfrutar del
elemento de agua y su sonido, y por último, trata de que el diseño sea
armonioso con el conjunto.
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